Científicos tucumanos desarrollaron un emprendimiento tecnológico para crear "huesos" con impresora 3D
Un equipo de científicos e investigadores, que cuenta con integrantes tucumanos del CONICET, de la UNT y del SIPROSA, concretó un emprendimiento tecnológico único en el país: se trata de BoneFit, una solución pensada para la fabricación de huesos artificiales, construidos con impresoras 3D y que el organismo humano reabsorbe de manera natural. En 2019, el IDEP Tucumán (Instituto de Desarrollo Productivo), el CONICET y la Universidad Tecnológica Nacional (Facultad Regional Tucumán) inauguraron el Club de Emprendedores, que impulsa el talento los proyectos innovadores en la provincia.
Para el desarrollo de los implantes artificiales, los creadores de BoneFit utilizan imágenes tomográficas y combinan materiales biocompatibles, biodegradables y osteoinductivos, que permiten crear piezas a medida, según las necesidades los pacientes. «Son implantes permanentes que no requieren cirugías posteriores. También son aptos para niños y adolescentes, ya que se integran al hueso existente y acompañan el crecimiento natural», explica la Dra. Andrea Rodríguez, profesora adjunta de la Carrera de Ingeniería Biomédica de la Facultad de Ciencias Exactas y Tecnología (FACET) de la Universidad Nacional de Tucumán (UNT).i
BoneFiT presenta una mínima tasa de fracaso, según remarca la investigadora adjunta del INSIBIO-CONICET, quien además subraya que los productos son económicos y pensados para pacientes de cualquier nivel social. En la actualidad, el equipo de investigadores desarrolla el plan de negocio del emprendimiento y trabaja en los ajustes necesarios para la aprobación de la Administración Nacional de Medicamentos, Alimentos y Tecnología Médica (ANMAT) y de su par de Estados Unidos (la FDA, por su sigla en inglés). Luego de esta etapa, esperan registrar los productos y comercializarlos. «El desarrollo de este emprendimiento tecnológico nos llevó 10 años de investigación. La pandemia nos impidió avanzar más rápido, pero nuestro objetivo es firmar, lo antes posible, convenios con hospitales públicos para que llegue a los pacientes más vulnerables», augura Rodríguez.
El año pasado, BoneFit se presentó en el concurso de emprendedores LATAM 100k y resultó finalistas en la categoría Pitch. «Esto nos puso muy contentos porque es un concurso importante de América Latina y el Caribe, en el cual participaron más de 1.240 proyectos», comenta la investigadora.
Cómo se colocan las prótesis
La colocación se concreta mediante una intervención quirúrgica, planificada de manera conjunta con el médico del paciente. «Antes de la fabricación de los huesos se analizan simulaciones hechas con computadoras para definir, junto con el médico, diferentes puntos del injerto óseo artificial. También se planifica el proceso quirúrgico para reducir el tiempo de cirugía y los riesgos de infección», explica Rodríguez.
Los productos de BoneFiT favorecen y aceleran la nueva formación de tejido óseo, porque están fabricados con un filamento osteoinductor y biodegradable, que se integra al hueso propio del paciente mientras se forma el nuevo hueso. Por otro lado, es el único emprendimiento científico en la Argentina con estas características. «En el país existen varios proyectos en el área de materiales para fabricación de huesos artificiales con impresión 3D. Pero el nuestro tiene un plus porque brinda una respuesta integral, desde el diseño de la prótesis y la implementación en casos clínicos», advierte Rodríguez.
El equipo multidisciplinario que desarrolló BoneFit está conformado por investigadores del INTI-CONICET (Dr. Leandro Monsalve), CONICET-UNC (Dr. Ezequiel Pérez), INSIBIO CONICET-UNT (Dra. Andrea Rodríguez), Universidad Maimonides (Od. Federico Santaren Carabetta), Ing. Belén Zamora (apoyo técnico). Además, cuenta con la colaboración de personal del SIPROSA (Ing. Maria José García Cabello y Marcelo Vázquez).