Con su producción de pulpas frutales, una empresa tucumana es líder en el NOA y en Cuyo
Producir pulpas de frutas para que la preparación de bebidas naturales sea más rápida. Con este objetivo, los tucumanos Gerardo Ajmat y Carlos Llebeili crearon en 2003 la empresa Calipul que, a fuerza de trabajo y de inversión, la firma consolidó su liderazgo comercial en el NOA. La compañía, que tiene su planta de producción y de envasado en la localidad de San Pablo, recibió a fines de 2019 el Sello de Distinción Marca Tucumán, que administra el IDEP (Instituto de Desarrollo Productivo).
Calipul produce una variedad de pulpas frutales que comercializa a empresas del sector gastronómico, principalmente bares, restaurantes, hoteles y barras de tragos. En los locales gastronómicos, las pulpas se utilizan para preparar licuados, jugos y tragos. Los sabores destacados son frutilla, limón, durazno, arándano, ananá, mango, melón y maracuyá, entre otros.
En la actualidad, la firma comercializa sus productos en Tucumán, en La Rioja, en Catamarca, en Santiago del Estero, en Salta y en Jujuy. También los distribuyen en Córdoba y en Mendoza. Según comentó Ajmat, el objetivo para 2020 es ingresar con más fuerza en el mercado de Buenos Aires, donde comenzaron las primeras incursiones comerciales mediante una empresa distribuidora. «En ese mercado hay competidores de mucha trayectoria, pero confiamos en que nuestros productos, por su calidad, podrán instalarse entre los consumidores», proyectó.
Para elaborar las pulpas de frutas, la empresa tucumana invirtió en un sistema moderno de licuadoras y de filtros. En la planta de producción reciben y almacenan las frutas, que compran a productores de Tucumán y de Mendoza, principalmente. Luego del proceso de licuado, el producto natural se envasa en botellas plásticas. «Esto facilita el manejo de los productos a la hora de preparar y de servir una bebida. Nuestros competidores envasan las pulpas en latas metálicas. Una vez que se abren, hay que volcar el contenido en otro envase. Con las botellas plásticas, esto no pasa. Es más rápido e higiénico», señaló Llebeili.
El año pasado, Calipul comenzó a buscar mercados para exportar sus pulpas de frutas. Con apoyo técnico y económico del IDEP Tucumán, participó en la feria internacional Expocruz, que se desarrolló en Santa Cruz de la Sierra, Bolivia. «Hay mucho interés por nuestros productos en el NOA. Y, por la cercanía con Bolivia, nos gustaría desarrollar esta oportunidad de exportar. Es otro de los objetivos para este año», concluyó Ajmat.