Día del Consumo Sustentable: prepará tu abono casero y reducí la producción de basura
El compost es un abono orgánico para el suelo y el compostaje es el proceso natural mediante el cual se obtiene. Así lo explica la Lic. en Ciencias Biológicas, Mayra Varela, quien remarca que el compost se puede producir de forma casera, con residuos orgánicos del hogar, siguiendo una de las máximas de la naturaleza: nada se pierde, todo se transforma.
El compost se genera a partir de la descomposición física y química de residuos orgánicos, remarca Varela, quien también se desempeña como Promotora Ambiental del Programa Mejoramiento de Barrios (PROMEBA) en Tucumán. La especialista afirma que la técnica de compostaje trae aparejado varios beneficios para el medio ambiente:
- Ayuda a reducir, en gran medida, la cantidad de residuos sólidos urbanos que van a los basurales y que circulan en gran medida en la ciudad. Una bolsa de basura diaria que se genera en un domicilio, contiene alrededor de un 40% de materia orgánica que puede ser reciclada y devuelta a la tierra en forma de abono para las plantas.
- Contribuye a disminuir la emisión de gases de efecto invernadero, como dióxido de carbono, que se producen en el tratamiento y quema de los desechos. De esta manera, contribuimos a mejorar la calidad del aire a escala local, y a disminuir el impacto en el cambio climático a escala regional y global.
- Al utilizarse como fertilizante, nos ayuda a disminuir el consumo de combustibles fósiles.
- Nos provee de fertilizante para nuestras plantas de manera gratuita.
- En términos generales, con el compostaje reducimos nuestra huella de carbono en el planeta, es decir, la cantidad de gases de efecto invernadero que emitimos a la atmósfera de manera directa o indirecta.
Cómo hacer compost en casa
1- Separá los residuos orgánicos en tu cocina. Para ello tendrás que tener un tacho exclusivamente para lo orgánico (cáscaras de frutas y verduras, restos de yerba, café, té, papel, cartón, etc.).
2- Una vez que tengas el tacho lleno, vacía tus residuos en la compostera.
3- La compostera puede ser un cajón de verduras o tachos de pintura, o puede estar directamente sobre la tierra.
4- En el caso de ser un recipiente, tendrá que tener perforaciones en la base y en las paredes para que drenen los líquidos que resultan de la descomposición (esos líquidos podrán ser usados también como fertilizantes) y para que los residuos se ventilen.
5- Sobre la base de la compostera hay que colocar hojarascas (hojas secas y ramitas), un poco de tierra y sobre ese colchón hay que arrojar los residuos orgánicos. Luego hay que colocar hojarascas y tierra nuevamente. Las capas se repite, una a una, hasta llenar el recipiente. Para acelerar el proceso se pueden colocar lombrices, que se encargaran de hacer su trabajo digestivo. Con el paso de las semanas, el volumen de residuos se irá reduciendo, con lo cual podés seguir colocando más residuos orgánicos en tu compostera.
«El proceso de compostaje (hasta la obtención final del producto) tarda unos meses. En verano, con las altas temperaturas, los resultados se aceleran, con lo cual se puede obtener el abono natural en, aproximadamente, unos tres meses. El compost no emite ningún olor desagradable, ya que se trata de un proceso de descomposición y no de putrefacción», concluye Varela.